14/F

Conoceré un hombre enigmático que suele vestirse de blanco, un estratega de batalla, un general que entiende de guerras y me enseñará en combate a mantener la vista fija en mi rival. Nunca creí llegar a conocerle pero, echada la suerte me pondré el mejor traje, ese que uso en ocasiones especiales donde el objetivo es la meta de triunfo. Me vestiré de alegría para que vea que no me asusta la pelea, respeto al contrincante que dejaré noqueado. Me calzare con templanza para andar segura en la nueva senda que recorreré a paso firme, sin retrocesos. Me peinare de razón ya no dejaré anidar pajaritos en mi cabeza, podrán revolotear más no quedarse. Me perfumare con promesas hechas de amor, aquellas olvidadas fragancias que antaño use y que fui vaciando por estúpidos motivos que ya ni recuerdo. Mis joyas serán sueños concretos que haré realidad, porque el destinó me sonríe, ilumina y brilla para mí. Y lo más importante... nunca más me olvidaré.