Mamma mía

Hoy en varios países de Latinoamérica se celebró el día de las madres, este rol se ha idealizado de tal forma que la madre es una mujer virginal y con superpoderes.

Creo que soy lo más anti día de la madre que existe, no creo en esas progenitoras

felices que corren tras los hijos alegres, se encargan de los quehaceres del hogar, trabajan, estudian, tienen tiempo para ellas mismas, con la pareja cogen como chica porno y todo lo hacen con una amplia sonrisa. ¡Ese cuento no me lo tragó! Con suerte llegó al final del día a la cama, sin ganas de manosearme y con la convicción de que una parte de mí no quería hijos, ¡oh rayos! ¿Dónde quedó esa chica? Encerrada entre biberones, pañales, cuadernos y tareas de primaria... Pero cada vez que recuerdo aquellas manitas acariciando mi rostro, esos besos furtivos, las cartas de amor, flores que llegaban de sorpresa, esos te amo al infinito y más allá, lo volvería hacer, con otra visión, menos rígida y con más cuidado.

¡He cometido tantos y tantos errores! Es complejo, a nadie le enseñan a ser mamá, solo se logra por instinto y por aquello amamanté hasta que mis pechos llegaron al suelo, mi vientre quedó hecho una bolsa de marsupial y mi pelvis luce una sexy cicatriz de 20 centímetros, lejos soy el prototipo de mujer estandarizado bajo los cánones de belleza modernos.

No somos mujeres fuertes, nuestros hijos nos hacen serlo, son el reactor nuclear que nos potencia a sacar energía desde lo más profundo para entregar a veces hasta lo que no tenemos, porque cuando no hay lo creamos para ellos.

No hay que romantizar el rol de mamá, solos somos mujeres que elegimos gestar en nuestro vientre con amor. Hay otras que no han podido concebir y paren desde el corazón adoptando vida, otras que por desgracia las hicieron madres al amparo de la violencia, también están las que no quieren maternar y eso está bien, todas deberíamos tener la oportunidad de elegir si queremos o no hijos.

Con esto digo que no estoy de acuerdo con el aborto, si estoy de acuerdo con la sexualidad responsable y madura, con el control natal masculino, la adopción homoparental o monoparental, también creo que una mujer puede elegir si no quiere hijos y quiere esterilizarse.

Hay tanto por decir de la maternidad, Podemos hablar mucho sobre ella lo que si aseguro que lo menos que tiene es el romanticismo.

PD. Gracias a mis hombres por el desayuno de cada mañana, por amarme incondicionalmente, soportar mis locuras, silencios, gritos y desahogos, por acordarse de llamarme y hablar horas por teléfono, por las cosillas ricas que me preparan, por hacerme rabiar para luego hacerme reír, por hacerme sentir que todos los días hay un motivo para celebrar... gracias, gracias, gracias.